Portada de Magazin del Mundo
El Magazine de esta semana nos ha sorprendido con un Especial de vinos -coordinado por Maribel González-, donde se comenta la pasión por el vino de Julio Iglesias, el protagonismo -triunfante además- de las mujeres con el vino en todas sus facetas, consumo incluido, además de informarnos de las catas organizadas por Iberia, durante los vuelos transatlánticos, suponemos, y algún maridaje exótico.
Magazin del Mundo
El maridaje, que antiguamente se limitaba -a grandes rasgos- al blanco con pescado y tinto para la carne- tiene, me refiero a mi punto de vista particular, una enorme importancia.
Vinos de gran calidad quedan completamente rebajados según el tipo de alimento que consumimos, o viceversa, algún caldo peleón sabe a gloria en determinadas ocasiones.
Soy de la opinión que la comida no es el único elemento que influye en el aprecio de lo que estamos bebiendo. Estado físico personal, ambiente, temperatura y compañía, son decisivos en el resultado final.
Magazin del Mundo
Las enólogas, empezando por María Isabel Mijares, pasando por las dos Victorias de José Pariente y con el equipo "casi cien por cien femenino" de -¡quién lo iba a decir!- Bodegas CUNE, se han situado en cabeza del gremio.
Situación que vamos descubriendo, lo aceptamos asombrados, y desde luego, aplaudimos convencidos.
Foto de Luís de las Alas
Magazin del Mundo
Pero lo que realmente me ha impresionado, ha sido la entrevista a Julio Iglesias, que admite ser copropietario de la Bodega Montecastro, de Ribera del Duero.
Hace bastantes años, antes de que los vinos de Ribera del Duero tomaran posición en primera línea, recuerdo que un cliente me pidió -me refiero a un local turístico de ambiente familiar- una botella de Pesquera.
-Querrá usted decir Pescador, blanco Pescador.
-No, tinto Pesquera.
Algunos meses después, en el programa de Luis del Olmo -Protagonistas- Julio Iglesias le comentaba a Luis que acababa de descorchar un vino estupendo de Ribera del Duero -hablaba desde su casa en Estados Unidos- y explicó se trataba de Pesquera, del que tenía buena provisión en su casa.
Con estos dos toques, me faltó tiempo para poner este vino en la carta del restaurante. Siempre que descorcho un botella, me acuerdo de Julio Iglesias.
No me ha extrañado pues, al leer la entrevista, las muy particulares opiniones de la estrella, de las que se deduce una extraordinaria afición al vino que, si tenemos en cuenta que no tiene problemas económicos, le ha permitido tener una bodega particular de los mejores vinos del mundo, y que le encanta compartir con sus amigos e invitados. Remarcando -ahí estoy totalmente de acuerdo- que no se puede beber solo. También hay que tener muy en cuenta -eso es lo que comenta- que no le mueve ningún interés crematístico, ni en su bodega particular ni, incluso, en la empresa asociada, Bodegas Montecastro.
Foto de Luís de las Alas
Magazin del Mundo
Canción de bodeguero
Por Victor Rodríguez
(copio el final de la entrevista)
P.¿Qué va a pasar con esos vinos cuando usted no esté?
R. Mire, por la cabeza de una persona de mi edad, de 67 años, pasan muchas cosas. Cuando entro en la bodega de mi casa, seme acumulan los pensamientos. Y a veces pienso: “Bueno, vamos a ver, ¿con quién voy a poder beber este vino sino me lo bebo hoy?” .Y tengo pocas respuestas. Antes tenía muchas respuestas, pero ahora tengo menos. Y como cada día voy a tener menos, lo que hago es bebérmelo. Porque si no me lo bebo, digo, a lo mejor se lo bebe la mujer de mi hijo. O el suegro de mi hija. Yo estaré muerto y ese suegro se va a poner... ja, ja, ja. Tengo una anécdota preciosa al respecto, ¿quiere escucharla?
P. Por favor...
R. Año 1987. Entonces yo estaba viviendo en Los Ángeles y muere John Huston, un obseso del vino. Su hija Anjelica era entonces novia de Jack Nicholson. En aquella época uno de mis suministradores de vino era un marchante americano simpatiquísimo que vivía en Bel Air, y un día, cenando, medice: “Oye, ¿sabes que ha muerto John Huston y quetenía la mejor colección de Petrus del país? Yo conozco a la familia; si quieres, mandamos una carta diciendo que estamos interesados en comprarla”. Un mes y medio después de la muerte enviamos una carta muy amable, muy simpática, nada abusiva. Alcabo de 15 días recibimos una contestación. Venía firmada por “Anjelica y Jack”. Y decía: “Estos vinos no se venden. Estos vinos nos los beberemos Jack y yo”. Lo debieron de pasar de maravilla en la cama con aquel vino...
P. O sea, que no hay ningún vino de John Huston en su bodega...
R. No, no.
P. Bueno, dígame, ¿qué pasará con su bodega?
R. Yo espero que sirva de recuerdo en la vida de mis hijos. Tengo muchos hijos, que se la beban ellos. Porque seguramente quedarán vinos de los que ya no habrá muchas botellas, y será un privilegio poder beberlos. Si les sirve para ser mejores compañeros entre ellos y amar a sus mujeres un poquito más
...
Sebastian
ResponderEliminarMuy buen trabajo el desarrollado con este blog, segui posteando...
Ahi te dejo para que lo cheques:
www.lasaludnatural.blogspot.com
fer
Amigo Cibersan:
ResponderEliminarTe agradezco tu amable comentario.
He repasado tus blogs y me resultan muy interesantes por la cantidad de especializada información sobre alimentos naturales.
Tomo nota para consultar dudas y mejorar conocimientos de frutas y verduras y demás temas de medicina natural.
Un saludo,
Sebastián Damunt