Tragos de risa

Libros, revistas, prensa y demás medios son –evidente- mis fuentes de información.

Hace unos días recibí SOBREMESA, y de entrada arrugué la nariz, ya que la portada no era de mi gusto. No por Miguel Bosé, sino por lo de “sabroso”. Igual que, en su día, tampoco me gusto

Foto de El Magazine de El Mundo

Sergi Arola, por motivos parecidos.

Afortunadamente, el contenido de la revista –como suele ser habitual- me resultó interesante.

Me sorprendió una curiosa anécdota que encabeza TRAGOS DE RISA, curioso escrito de Saúl Cepeda,

con ilustraciones de Sir Cámara

anécdota que a todo el que se la cuento, se queda vivamente sorprendido y de inmediato te preguntan:

-¿Pagaron?

-¿Es cierta la historia?

Me ha sorprendido y maravillado también, la nueva página web de SOBREMESA. Es verdaderamente útil y muy práctica. Nos ha permitido descargarnos fácilmente, la historia que comentamos:

“Es una buena idea que Ferran Adrià cierre elBulli durante un par de años –como ya hiciera su homólogo Joël Robuchon–, especialmente si en ese tiempo cambia el gotelé de las paredes. El parón vendrá bien para mitificar anécdotas, muchas de ellas relacionadas con la excelente bodega custodiada por David Seijas.

Ésta provocó un imborrable recuerdo para dos parejas trabajadoras que consiguieron mesa en el restaurante de Roses tras dos años de espera. Durante la cena, confusos y emocionados, eligieron atolondradamente un vino entre las numerosas referencias. Como pareció gustarles, ordenaron otra botella del mismo vino para pasar los 35 platos de cada menú.

Al pedir la cuenta, el propio Juli Soler, director de elBulli, hizo acto de presencia para agradecerles su visita y afirmar que estaban invitados a la cena y que sólo debían abonar el vino. Esta buena gente había confundido los 6.000 euros por botella con la notación 60.00 euros y lo que ya les parecía un vino caro, lo era en una magnitud que no existía en su perspectiva del mundo”.