Los bocadillos siempre han estado de moda, aunque, recientemente,
aparecen hasta en los libros.
El mes pasado presenté un
original y bonito libro, titulado “Los
mejores bocadillo del mundo”, lo que nos permitió descubrir algunas
curiosidades.
Además del Muffuletta
y los Finger Sandwiches, y gracias a
nuestra amiga Fina,
que siempre está en el “rovell de l’ou”, también supimos del Poor Boy, que también tiene su aquel.
Esto de viene a cuento,
porque Fina, supongo que con tanto
bocadillo a la vista, le dio por presentar una entrada sobre el tema, y ahí
podemos ver Croque-Monsieur
y Croque-Madam. Pero lo que quiero comentar es que, hace algún tiempo, a
principios de año, también presentó La
cocinera del Presidente, y yo me dije que no se me ocurriría verla, pero
finalmente, mira por donde, tengo la película, la ví, y me resultó interesante.
La
trufa, suele ser un tabú para la mayoría de los profesionales
y también del público. Nunca sabes cómo se prepara, como se toma, como se usa.
Pues bien, ahí descubrimos –en la película- un uso original. ¡Bocata de trufa!
Bon
appétit!
